Diez años de Cine en el Parque
Este año, el proyecto Cine en el Parque celebró 10 años de hacer funciones al aire libre en parques de la ciudad. Después de un receso obligado por la pandemia, su pantalla itinerante estará de regreso este fin de semana y a mediados de Octubre.
La diferencia es que, ahora, las funciones de cine extramuros son el negocio que todos querrán intentar. Platiqué con Raymundo Martínez Mena, creador de Cine en el Parque, quien promovió esta actividad una década antes de que fuera la nueva normalidad. Hablamos de trabajar en un giro old fashion que vuelve a ser novedad, de cómo el cine al aire libre en lugares públicos pasó de ser una acción cultural de los gobiernos a un modelo de negocio y, de paso, hablamos de una de sus vidas pasadas como co-fundador de el último gran videoclub de la ciudad: Videodromo. El audio a la cabeza de este newsletter es mi entrevista con él.
Foto: IG Cine en el Parque.
La carrera por el edificio más alto
En Monterrey, cuando se trata de demostrar superioridad, el límite es el cielo.
Literalmente lo es para los desarrolladores que llevan los últimos años compitiendo por construir el edificio más alto no de la ciudad, no del país. Del continente.
Según medios locales, Ancore Group, con la participación de Nest y Alora, construirán la segunda torre más alta de América en el terreno donde está El Rey del Cabrito. Con 440 metros de altura, este edificio quedaría detrás de One World Trade Center, en Nueva York, de 541.3 metros y rebasaría la altura de la actual segunda torre más alta, la Willis Tower, de Chicago, con 442.1 metros. ¿Cómo conseguirán superar en altura al segundo lugar de los rascacielos? Con una antena. Dicha torre estará a un lado de la que ahora tiene el récord de ser la más alta de latinoamérica, T.OP con 348 metros, la cual terminaría siendo la segunda más alta de latinoamérica luego de que se construya la segunda más alta de América a lado de esta. Esto complicaría los planes de GIM (Grupo Inmobiliario Monterrey, los dueños de Showcenter Complex y Plaza Fiesta San Agustín) que el año pasado anunció que en 2021 construirá la torre Insignia, de 320 metros de altura, la cual mencionaron que sería la más alta de latinoamérica.
Fotos: NightLife Monterrey
No hace falta intentar comprender cuál será el orden de altura una vez que estas torres coexistan en el continente. Hace falta comprender en principio es cuál es la razón de ser, no solo de esta fiebre por romper récords de altura, sino además de romperla consecutivamente en un plazo tan corto, si tomamos en cuenta que las dos torres son del mismo constructor que acaba de terminar de hacer T.OP.
Los rascacielos no son motivo de prestigio ni para la ciudad que los alberga, ni para los arquitectos que los diseñan. En esta versión en español de un artículo publicado en CityLab se mencionan varias cosas interesantes a cerca de los rascacielos.
Por ejemplo: que el hecho de que los edificios más altos del mundo se encuentren en países donde no hay democracia (Arabia Saudita, China, Malasia) no es coincidencia.
Con todo, Knutsen advierte una diferencia en el hecho de que distintos gobiernos las construyan. “En las democracias habrá más rascacielos en la medida en que se desarrolle la urbanización y crezcan los ingresos”, indica Knutsen. “Pero esto no se aprecia en las autocracias. En estas formas de gobierno se hacen los rascacielos sí o sí”.
“Si estamos en lo cierto –que los rascacielos son construidos como muestra de la sed de poder, o bien como proyectos inútilmente costosos–, es dable esperar más frutos de esta 'vanidad por la altura' en autocracias que en democracias”
También se percataron de que las edificaciones autocráticas presentan más metros por piso y superficie de suelo que las construidas en democracias.
Para buscar responder a la pregunta de cómo el tipo de gobierno influyó en la construcción de los rascacielos, el informe compara datos provenientes del Skyscraper Center, perteneciente a la organización no gubernamental Council on Tall Buildings and Urban Habitat, con los estándares globales definidos por .
Uno de los modelos de Gjerlow y Knutsen concluye que, después de tener en cuenta factores como la urbanización, el ingreso y la población, las autocracias fabrican, aproximadamente, 150 metros más de rascacielos cada año que sus contrapartes democráticas.
No es que aquí quepa a la perfección la comparación política entre Monterrey y las capitales que son sedes de estos edificios. Las torres que se construirán en Monterrey serán de la iniciativa privada. Pero expresiones como “vanity height”, sed de poder y construir por construir suenan muy pertinentes dentro de la cultura empresarial que se empeña en construirlas.
Para regresar este tema a sus raíces regias de sed de poder, prestemos atención a las notas sobre la construcción de la futura torre que dicen que estará ubicada en el terreno de la sucursal de El Rey del Cabrito de Constitución. ¿Es esta una de las propiedades de las que fue despojada la esposa de El Rey del Cabrito por su hijo?
Regios will be regios es un newsletter semanal gratuito (que podría ser un podcast) sobre Monterrey, escrito por Maximiliano Torres.
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