Las obligaciones de la vida me impiden enviar este newsletter en su forma óptima.
*se muda a Escobedo*
Jaja.
Y ahora hay castores!
Ah, en el río.
¿En dónde hay castores?
*se muda a Escobedo*
Jaja.
Y ahora hay castores!
Ah, en el río.
¿En dónde hay castores?